Juana Castillo
Sobre la mesa del despacho, de madera noble y bien labrada, en su centro, hay un revólver y un cortaplumas. La luz de la lámpara incide sobre ellos; el primero lanza su negrura al vacío de la habitación y se refleja en el espejo cercano. El cortaplumas brilla, deslumbra, atrae… En caso de suicidio, ¿cuál cumplirá mejor su cometido?
Este micro relato pertenece al cuaderno casi inédito “In crescendo”
Martes, 23-XI-04
6 comentarios:
Felicidades por este micro relato, creo que es excelente.Un abrazo
Thelma
Gracias, Thelma, por el comentario.
Un abrazo, Juana.
Al margen de que me interesa todo lo breve, cuando es bueno (como es el
caso),
este texto me parece que aceptaría una estructura de versos sin hacerse
daño.
En mi cabeza funciona como poema.
Miguel Ruibal.
Tienes razón, Miguel, bien hubiera podido tatarse de un poema, pero se me quedó en prosa. De todos modos me emociona que lo consideres bueno. Y ya sabes: escritor, uno; lecturas e interpretaciones. .., tantas como lectores. Tal vez a tí este micro relato te funcione (suene) mejor como poema, pues "escúchalo" como tal.
Juana.
Yo me quedo en la versión de Juana.
Y veo que viene muy a cuento lo que dice, con la anotación de hoy en mi blogg.
C.Dolores
Juana, hola amiga.
Felicitote por el minitexto: certeros e ingeniosos indicios, todos muy significativos, llevando al lector a un final posible. Me sorprendiste con ese final, amiga, ya que comprometés más al lector que al personaje mismo.
Abrazo y cuidate.
Juanca.
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